Os traemos una serie especial sobre el mundo masovero, tan característico en algunas comarcas del interior de Castellón. Descubrir su historia, su cultura y su patrimonio nos ayudará a entender la importancia de las masías, su relación con el territorio y la configuración de nuestros paisajes.
Masía, mas, maset, masada, masico… Todos hemos escuchado a lo largo de nuestra vida alguno de estos términos, pero, ¿sabemos lo que son?
Según la RAE una masía es: “una casa de labor, con finca agrícola y ganadera, típica del territorio que ocupaba el antiguo reino de Aragón.” Esta definición se queda corta. Muy corta. Y es que cuando hablamos del mundo masovero, estamos hablando de una sociedad, una economía, una organización territorial y política, una cultura, un patrimonio, un conocimiento, y, en definitiva, una manera de vivir, muy característica, identitaria y única.
Las masadas han jugado un papel clave a la hora de definir nuestro territorio actual, ya que, habitadas o no, nos las encontramos por prácticamente toda la extensión que ocupaba la Corona de Aragón (a excepción de las Islas Baleares).
En el País Valencià, los mases tuvieron mayor importancia en el interior de nuestra provincia, especialmente en El Maestrat y en Els Ports. Aquí, actuaban como pequeños núcleos de población dispersos por el monte, en zonas con fuentes de agua y tierras para la agricultura y la ganadería, prácticamente independientes y sin apenas relacionarse con el municipio al que pertenecían. La difícil orografía de nuestras montañas favorecía este aislamiento de los masoveros.
Debido a este aislamiento, eran sociedades de subsistencia que dependían íntegramente de la agricultura, de la ganadería y de lo que el medio les podía ofrecer. Como nos cuentan en el microdocumental que grabamos hace ya unos años: se adaptaban al entorno gracias al ingenio transformando gran parte de nuestros espacios rurales hasta lo que hoy día conocemos. Unos espacios rurales llenos de rico patrimonio material, abanderado por las construcciones de pedra en sec, pero sobre todo llenos de conocimientos que desgraciadamente con el abandono del mundo masovero corremos el riesgo de perder.
Por todo esto, debemos valorar la cultura masovera, ya que como bien se dice en el documental Porque eres masovera (2009), y pudiéndose extrapolar a gran parte de las montañas catalanas, aragonesas y valencianas:
“El Maestrazgo, sin masías, sin masoveros, no tiene sentido”.
¿Os ha parecido interesante? Pues estad atentos a las nuevas entregas
Coming soon… ¿Cómo se organizaban los masoveros?